Ir directamente a la información del producto
1 de 2

pneumamusic

PN 910 DICIT DOMINUS, Verba Iesu in cantu Palabras de Cristo en el Canto Gregoriano • Words of Christ and Gregorian Melodies

PN 910 DICIT DOMINUS, Verba Iesu in cantu Palabras de Cristo en el Canto Gregoriano • Words of Christ and Gregorian Melodies

Precio habitual €19,50 EUR
Precio habitual Precio de oferta €19,50 EUR
Oferta Agotado
Impuesto incluido.

Índice

DICIT DOMINUS, Verba Iesu in cantu
Palabras de Cristo en el Canto Gregoriano • Words of Christ and Gregorian Melodies

LAS BODAS DE CANÁ (JUAN, 2)
1.- Quid mihi et tibi est Antífona. Modo VII 0:55
2.- Dicit Dominus : Implete hydrias + Ps. 65. Comunión. Modo VI 3:40
LOS PRIMEROS DISCÍPULOS (MATEO, 4)
3.- Ambulans Iesus Antífona del Magnificat. Modo I 2:54
EL SERMÓN DE LA MONTAÑA (MATEO, 5)
4.- Videns autem Iesus Recitativo 2:31
- Beati pauperes Antífona Modo I
- Beati mundo corde + Ps. 33 Comunión. Modo I
LA ANTIGUA LEY (MATEO, 5)
5.- Amen dico vobis Antífona. Modo VIII 0:50
6 - Audistis quia dictum est Recitativo 3:46
- Si offers munus tuum Antífona del Magnificat. Modo I
LA CONFIANZA EN EL PADRE (MATEO, 11)
7.- Venite ad me Antífona. Modo VIII 0:30
8.- Tollite iugum Responsorio. Modo VII 2:43
LAS PARÁBOLAS (MATEO, 13 – JUAN, 15)
9.- Simile est enim regnum…homini Antífona. Modo I 0:55
10.- Simile est regnum cælorum Comunión. Modo VIII 1:08
11.- Simile est enim regnum…sagenæ, Antífona del Magnificat. Modo I 1:15
12.- Ego sum vitis vera Responsorio. Modo V 2:04
LA MUJER CANANÉA (MATEO, 15)
13.- Egressus Iesus secessit Antífona. Modo I 0:52
14.- Dixit Dominus mulieri Chananææ Antifona. Modo VIII 3:12
JESÚS & PEDRO (MATEO, 16)
15.- Quem dicunt homines Antífona. Modo VIII 0:43
16.- Tu es pastor ovium Responsorio. Modo VIII 3:24
EL VIAJE A JERUSALÉN (MATEO, 19)
17.- Tunc oblati sunt Recitativo 0:50
- Sinite parvulos Antífona. Modo VII
18.- Magister bone Antifona. Modo VIII 1:00
19.- Dicit ille: Quæ? Recitativo 1:55
- Si vis perfectus esse, Antífona. Modo I
PERMANECED VIGILANTES… (MATEO, 24)
20.- Fidelis servus + Ps. 131 Comunión. Modo VII 2:05
21.- Fidelis servus Responsorio. Modo IV 2:57
22.- Beatus servus Comunión. Modo III 2:07
EN CASA DE ZAQUEO (LUCAS. 19)
23.- Zachæe, festinans descende Antífona. Modo VIII 2:41
LLANTO POR JERUSALÉN (LUCAS, 19)
24.- Cum appropinquaret. Antífona. Modo I 3:18
LA MULTIPLICACIÓN DE LOS PANES Y LOS PECES (JUAN, 6)
25.- Cum sublevasset oculos Iesus Antífona. Modo I 1:09
26.- Accepit ergo Iesus panes Antífona. Modo I 0:23
27.- Ut autem saturati sunt Antífona del Magnificat. Modo I 2:53
PROMESA DEL ENVÍO DEL ESPÍRITU SANTO (JUAN, 14)
28.- Ego rogabo Patrem Responsorio. Modo III 3:19
AMOR POR LOS DISCÍPULOS (JUAN, 15 Y 21)
29.- Simon Ioannis Comunión. Modo VI 2:44
30.- Dicite ei: Etiam Domine. Recitativo 4:19
- Dicit Dominus Petro Introito. Modo IV
MUERTE (MATEO, 27 – LUCAS, 23 – JUAN, 19)
31.- Tenebræ factæ sunt Responsorio. Modo VII 3:29
CAMINO DE EMAÚS (LUCAS 24)
32.- Et ecce duo ex illis Recitativo 2:38
- Iesus iunxit se Antífona . Modo VIII
- Nonne sic oportuit Antífona . Modo VIII
- Et incipiens a Moyse Antífona . Modo I
33.- Et appropinquaverunt castello Recitativo 1:29
- Et intravit cum illis Antífona . Modo III
- Nonne cor nostrum Antífona . Modo I

Ediciones:
Gradule Triplex, Solesmes 1979
Liber Hymnarius, Solesmes, 1983
Liber Antiphonarius pro diurnis horis. I. De Tempore, Solesmes, 2005

SCHOLA ANTIQUA. Director: Juan Carlos Asensio Palacios
Miguel Ángel Asensio Palacios
Javier Blasco Blanco
Alfredo Contreras Sanz
Miguel Ángel Fernández González *
Enrique de la Fuente González
Javier de la Fuente Jarillo
Miguel García Rodríguez
Román Garcia-Miguel Gallego*
Jorge L. Gómez Ríos
Benjamín González García
Antonio de Gregorio Jabato
Luis Fernando Loro Rodríguez
Benigno A. Rodríguez García
Jesus Maria Román Ruiz del Moral
Federico Rubio García
Javier Rubio García
Emilio Rubio Sadia
(*) Solistas

Sonido: Javier Rubio García • Grabado 3 al 5 de marzo de 2006, en el Monasterio de Santa María de El Parral, Segovia
Producción: EDUARDO PANIAGUA • 2006 PNEUMA

Descripción

DICIT DOMINUS, Palabras de Cristo en el Canto Gregoriano
Es verdad que el Canto Gregoriano es, sobre todo, oración y como tal, su contexto es el de una música funcional. Su interpretación está orientada a un fin. No es gratuita. Por ello el Canto Gregoriano cobra autenticidad en las celebraciones en las que sus textos recrean un ambiente referido a una liturgia propia de un tiempo o específica de la conmemoración del santoral. Todo ello enmarcado dentro de las grandes articulaciones en las que se ha desarrollado durante siglos la liturgia de la Iglesia: La Misa y el Oficio Divino.

También es cierto que cada vez es más excepcional poder asistir a una liturgia en la que todos los cantos sean en latín y pertenezcan al repertorio que llamamos Gregoriano. A ello han contribuido de manera más o menos activa varios factores que no vamos a analizar aquí. Pero la realidad habla por sí misma. Y actualmente el conocimiento sonoro del Canto Gregoriano está más cercano del mundo de la discografía y del concierto que de la propia liturgia. Es decir, cada vez está más alejado de su contexto. Pero este alejamiento y su proliferación en otros “medios” ha propiciado que podamos hacer reconstrucciones más o menos fantasiosas e incluso irreales, por supuesto aplicando estos calificativos dentro del contexto al que antes aludíamos. Hoy día podemos encontrar verdaderas antologías sonoras en las que se repasa un tiempo litúrgico, las piezas dedicadas a tal o cual santo, e incluso imitando un libro medieval, es posible reproducir a modo de Tonario una pequeña colección de piezas del repertorio convenientemente ordenadas de acuerdo con su categoría modal. Dentro de esta “libertad” se encuentra la presente grabación de Schola Antiqua.

Aprovechando la reciente edición del primer volumen del Antifonario Monástico (Solesmes, 2005), cuyo contenido, el Proprium de Tempore nos facilitaba un seguimiento privilegiado del Año Litúrgico, la idea de dedicar un registro monográfico a textos en los que Cristo es protagonista directo fue tomando forma. Es de sobra conocido que la mayoría de los textos del repertorio original provienen del Antiguo Testamento y, más concretamente, del Libro de los Salmos; solamente se interrumpe esta tendencia, y no siempre, en las piezas compuestas por la Schola Cantorum, esto es para el repertorio de la Misa: los introitos y comuniones. En ambos casos se trata de cantos funcionales, que acompañan sendas procesiones: la de entrada del celebrante y la de los fieles a comulgar. La relación directa con las lecturas del día, sobre todo del canto de comunión con el Evangelio, hace que en sus textos Cristo “hable” con frecuencia. Por ello junto a las melodías del nuevo Antifonario figuran algunas antífonas de introito y de comunión pertenecientes al Gradual, eso sí, convenientemente restituidas tras su comparación con los manuscritos más autorizados de la tradición gregoriana. También hemos aprovechado algunos responsorios que ya habían aparecido en otras ediciones (Liber Hymnarius, 1983) en los que Cristo es protagonista directo como ocurre en Tu es pastor ovium, o en el conocido Tenebrae factae sunt, a pesar de las breves y dramáticas palabras que pronuncia en este último.

Pero es en las antífonas pertenecientes a las distintas Horas diurnas del Oficio Divino donde encontramos nuestra principal materia prima. Ello nos ha permitido hacer un seguimiento a la vida pública de Cristo dentro del repertorio gregoriano siguiendo a los evangelistas Mateo, Lucas y Juan. Marcos está ausente ya que como apuntan los editores del Antifonario, los textos del evangelio según san Marcos nunca fueron utilizados para ser cantados, al menos en la antigua tradición, antes de la liturgia del Vaticano II. Las piezas cuyos textos se encuentran musicalizados siguiendo a este evangelista, pertenecen a lo que podemos llamar composiciones “neogregorianas”. Desde las bodas de Caná con las dubitativas palabras de Cristo, hasta el episodio, ya resucitado, de los discípulos de Emaús, se han repasado distintos episodios acompañados de melodías de una fina inspiración. Analizando los distintos textos se comprueba que los compositores dispusieron de una gran libertad a la hora de seleccionar los mismos. Tomaban fragmentos de aquí y de allá, aparentemente a su antojo, pero siempre con la mirada puesta en las palabras importantes, en aquellas que hacen que su mensaje fuese actual para aquellos que diaria, semanal, anualmente debían rezar cantándolos. Por ello a veces no se refleja completamente dentro de una misma pieza el texto íntegro de tal o cual versículo. Incluso para unir determinados pasajes y darles un sentido pleno, nos hemos permitido “componer” recitativos que completaran las secuencias evangélicas para situar mejor cada una de las acciones descritas en cada momento. Esta “composición” ha supuesto acomodarse al mundo sonoro de las piezas que se enlazan, provocando alguna “modulación” ocasional para poder unir dos antífonas mediante un recitativo de sonoridad común. En ocasiones se trata de un pequeño fragmento que sirve de introducción a una sencilla antífona y en otras el recitativo es un verdadero interludio con entidad propia que ayuda a unir distintos episodios separados por algunos versículos en el texto original. Desde un principio vimos claro que no queríamos establecer un diálogo entre Cristo, un narrador o distintos personajes. La mayoría de las piezas de la grabación son antífonas cuyo canto era comunitario. El coro monástico se sentía identificado con las palabras pronunciadas en común, pero cada uno de sus miembros las pronunciaba de manera personal, uniéndose al conjunto de sus hermanos. Por ello optamos por una interpretación coral, salvo en los recitativos y en los salmos de las antífonas o versículos de cantos responsoriales.

Como era de esperar el nuevo Antifonario no solamente presenta las melodías más depuradas, con nuevos signos neumáticos que recuerdan las primitivas notaciones y ayudan a su interpretación sin necesidad de la consulta de los manuscritos, sino que además sugiere la necesidad de revisión de algunas tradiciones estereotipadas a lo largo del tiempo, pero con poco sentido a la hora de entender el Canto Gregoriano como genuina fusión de música y texto. Por ello el primer versículo del Magnificat no se interpreta a la manera tradicional, sino uniendo los antiguos dos primeros versículos en uno solo. Así el texto cobra pleno sentido y tradición y modernidad se dan la mano, y de paso, no se pierde del todo el contexto litúrgico, pues se interpretan los salmos y cánticos después de algunas antífonas. De la misma manera no hemos querido renunciar en la última pieza de la grabación a aplicar las técnicas del organum primitivo. El texto sugería que no bastaba la monodia para expresar la inquietud de los dos discípulos de Emaús tras el encuentro con Cristo resucitado a quien en un principio no conocieron. Una feliz casualidad que nos permite avanzar un poco más en la historia de la música. De la misma manera es casual que el número de pistas del cd coincida con los años de vida terrenal del protagonista.

Juan Carlos Asensio Palacios

DICIT DOMINUS Words of Christ and Gregorian Melodies
It is true that Gregorian chant is above all prayer, and as such can be considered within the context of music with a function. It is performed with an end in mind. It is not gratuitous. For this reason Gregorian chant becomes more authentic in the celebrations in which its texts recreate the atmosphere of a service in the Church calendar or the commemoration of a specific saint’s day. All this is within the framework of the great articulations within which the Liturgy of the Church has developed over the centuries: Mass and the Divine Office.

It is also true that it is becoming more of an exception to be able to attend a service in which all the chants are in Latin and belong to the repertoire we know as Gregorian. Several factors, which we are not going to analyse here, have contributed more or less actively to this. But reality speaks for itself. Currently, the sound of Gregorian chant is known better through the recording world and concerts than through the Liturgy. Consequently, it has moved increasingly further away from its context. But this distance and a proliferation in other “media” have favoured reconstructions that to a certain extent are influenced by fantasy and are even unreal, these of course, being adjectives that can be applied within the context to which we have already referred. These days, there are true musical anthologies that reflect a season in the Christian calendar, pieces dedicated to such and such a saint, or that even imitate a medieval book. It is possible to reproduce a small collection of pieces of the repertoire suitably ordered according to modal category like a Tonary. This recording by Schola Antiqua falls within this “liberty”.

The idea of creating a monographic register of texts in which Christ is the direct protagonist began to take shape after the recent publication of the first volume of the Antifonario Monástico (Monastic Antiphonary) (Solesmes, 2005) whose content, the Proprium de Tempore provided a privileged guide to the Liturgical Year. It is well known that most of the texts from the original repertoire come from the Old Testament, and, in particular from the Book of Psalms. This trend is only interrupted, and then not always, in the pieces composed by the Schola Cantorum for the Mass repertoire, the introits and communion. In both cases the chants have a function - to accompany different processions, the entrance of the celebrant and the approach of the congregation to take communion. The direct relationship with the readings of the day, above all of the communion chant with the Gospel, means that Christ often “talks” through the texts. For this reason some introit and communion antiphons that belong to the Gradual have been included together with the melodies from the new Antiphonary. These antiphons have been suitably restored after their comparison with the most authorised manuscripts of the Gregorian tradition. We have also made use of some responsories that had already appeared in other publications (Liber Hymnarius, 1983) in which Christ is the direct protagonist as in Tu es pastor ovium, or in the well known Tenebrae factae sunt, in spite of the brief and dramatic words uttered in the latter.

But we found most of our raw material in the antiphons for the different daytime Hours of the Divine Office. These enabled us to follow the public life of Christ within the Gregorian repertoire through the evangelists Matthew, Luke and John. Mark is absent because, as the publishers of the Antiphonary point out, the texts of the Gospel according to St. Mark were never used in song, at least in the ancient tradition before the Liturgy of the II Vatican Council. The pieces, whose texts are set to music following this Evangelist, belong to what we can call “neogregorian” compositions. Different episodes of the life of Christ have been studied and are accompanied by melodies of a refined inspiration, from the wedding at Cana with the dubitative words of Christ, to the episode, after the resurrection, of the disciples at Emmaus. When analysing the different texts it can be appreciated that the composers enjoyed great liberty when they were choosing them. They took fragments from here and there, apparently at will, but always taking note of the important words that made their message relevant for those who daily, weekly or annually had to pray by singing them. For this reason the whole text in its entirety of a certain biblical verse is not always included. We have even taken the liberty of “composing” recitatives that complete the evangelical sequences and join certain passages to give them sense and situate each of the actions described at a given moment more adequately. This “composition” has meant that we had to adapt to the type of sound of the pieces that are linked, sometimes creating a “modulation” in order to join two antiphons through a recitative with a common sound. Sometimes just a small fragment acts as an introduction to a simple antiphon and at other times the recitative is a true interlude in its own right that helps to unite separate episodes through some verses in the original text. From the outset we clearly saw that we did not want to establish a dialogue between Christ and a narrator or different characters. Most of the pieces on this recording are antiphons whose chant was sung in a group. The monastic choir felt identified with the words they pronounced together, but each one of its members uttered them in a personal way, joining forces with the group of brothers. For that reason we have opted for a choral interpretation, except in the recitatives and in the psalms of the antiphons or verses of reponsorial chants.

As was to be expected the new Antiphonary is full of the purest melodies, with new neumatic symbols that are redolent of primitive notation and aid performance without the need to consult manuscripts. But they also suggest the need to revise some traditions that have become stereotypes over time, although often illogically when considering Gregorian chant as a genuine fusion of music and text. Therefore the first verse of the Magnificat is not played in the traditional way, but by joining the original first two verses into one. In this way the text becomes clear and tradition and modernity go hand in hand. Also, the Liturgical context is not completely lost on the way as psalms and canticles are performed after some antiphons. Likewise, we did not wish to forsake the application of the techniques of the primitive organum in the last piece on the recording. The text suggests that monody was not enough to express the disquiet of the two disciples of Emmaus after meeting the resurrected Christ who at first they did not even recognise. A happy coincidence that allows us to advance a little more in the history of the music. In the same way it is coincidence that the number of tracks on the CD coincides with the years of life on earth of the main character.

Juan Carlos Asensio Palacios

Ver todos los detalles
  • Envío gratis en pedidos mayores a 50 €.

    Entrega en 5-7 días laborables para pedidos en España, en el caso de envíos fuera de España el tiempo de envío podría ser algo mayor.

  • Todo el trabajo de Pneuma Music se ha realizado en España.

    Música medieval española inédita hasta el momento. Sus discos, con  formato Digipack de cubierta de cartón y libreto interior (bilingüe + idioma original), quieren acercarse a una obra de arte total.